Señor Director:
Hoy el Senado vota un proyecto clave: la reforma al sistema político. Aun cuando no es demasiado ambiciosa, es un paso imprescindible para superar la fragmentación y la parálisis actual de Chile. La implementación de un umbral para los partidos y el fortalecimiento de su institucionalidad son medidas necesarias para reordenar nuestra política.
Llevamos años repitiendo el diagnóstico: partidos debilitados, candidaturas personalistas y un Congreso atomizado. La ciudadanía lo percibe con claridad: solo un 4% confía en los partidos y un 7% en el Congreso, mientras la adhesión a la democracia cae a un preocupante 52% (CEP, 2025). No posterguemos lo evidente.
El Senado puede dar hoy un paso necesario que será difícil replicar en la Cámara de Diputados. Chile no puede seguir esperando.
Arnau Sarrà es investigador de IdeaPaís. Carta publicada en La Segunda, el 10 de junio.